lunes, 27 de junio de 2016

Eficacia y Aplicación de la Hipnosis Clínica

La hipnosis como una de las técnicas
eficientes para mejora la calidad
de vida en un gran número de pacientes.


La hipnosis es una potente técnica para trabajar en la mejora de la calidad de vida en un gran número y variedad de pacientes. Sin embargo, es muy frecuente que los pacientes e incluso algunos terapeutas, tengan creencias erróneas que hace que el uso de esta herramienta clínica sea difícil.
Esta herramienta, de uso terapéutico, se ha definido como un conjunto de procedimientos en donde una persona (hipnotizador), sugiere a otra persona (paciente) que experimente diversos cambios ya sea de forma sensorial, como el alivio de algún dolor; de percepción, como una alucinación visual;  cognitiva, como un ejemplo sería en expectativas sobre algún tema personal; o en el control motriz, como por ejemplo una levitación del brazo u otra extremidad. En la aplicación clínica, el contexto hipnótico es generalmente establecido por medio de un procedimiento de inducción; durante estas inducciones hipnóticas, el hipnotizador será el que guíe al paciente por medio de imágenes tranquilizadoras y relajantes para establecerlos en una sensación de relajación, por medio de la distracción de los estímulos externos para que así estén más abiertos a las sugestiones terapéuticas.

Esta técnica consta de dos partes para su realización, las cuales serán:


  • Inducción a a sugestión terapéutica, donde los pacientes están dispuestos a cooperar con el procedimiento para llevar acabo la hipnosis. Erróneamente se cree que los pacientes se vuelven vulnerables de alguna manera, creyendo que se les obligara a hacer algo que no quieren.
  • Aplicación, en está parte el paciente recibe del hipnotizador las sugestiones, donde pueden ser referidas a que el paciente experimente cambios en procesos sensoriales o cognitivos, ya sea en lo físico o en lo conductual. 
Es de gran importancia que antes de la primera
 sesión se le informe sobre el procedimiento de la técnica. 
Es frecuentemente ver que en los pacientes exista un miedo a esta práctica, por concepciones erróneas que fueron creadas por lo que han visto o leído: en televisión, cine y hasta en espectáculos, donde son realizados con propósitos de entretenimiento. Es por eso que los medios populares siguen dando esta imagen errónea de la hipnosis como recurso para controlar la mente, como medio de recuperación de  recuerdos perdidos y hasta un inductor de la conducta criminal. Y por tal motivo es de suma importancia, desde una perspectiva clínica y ética, que antes de la primera sesión se lleve acabo la educación del paciente sobre lo que es este ejercicio, así como desmitificarlo y disipar todo esos mitos y miedos que la persona posee acerca de la hipnosis. 

Hoy en día, es un área de investigación tanto activa como dinámica, puesto que se utiliza a lado de otros tratamientos para controlar síntomas físicos y psicológicos, demostrando ser un método eficaz para mejorar la calidad de vida de distintas personas y con distintos problemas, como son: el cáncer, enfermedades cardiovasculares, viscerales, de estrés y ansiedad, de fobias, de obesidad y hasta diabetes.  Es en estos casos que la hipnosis es frecuentemente utilizada para controlar síntomas de estos tipos de enfermedades, como por ejemplo el dolor o malestar de distintos tipos, como de espalda, quemaduras, psicológicos (depresión), crónicos,  entre otros. 

Además de todo lo ya antes mencionado, los datos recientes proponen que la hipnosis puede incluso afectar a un rango más amplio de resultados, ya que aparte de los efectos descritos anteriormente, también están surgiendo una serie de estudios sobre la capacidad de la hipnosis para aumentar el funcionamiento inmune. Aunque tales hallazgos deben ser  ampliados y replicados, es importante el haber observado que la hipnosis, bajo circunstancias adecuadas, puede afectar la función inmune. Es curioso que las intervenciones psicológicas provoquen estos efectos de medida fisiológica, por lo cual una parte pequeña del efecto sobre la función inmune sea fascinante y tenga implicaciones clínicas. 

Por ende, es de suma importancia aclarar que este procedimiento no debe sustituir las terapias existentes, sino que debe ser incorporada con más frecuencia a la atención clínica para mejorar los resultados obtenidos en los pacientes, ya que es una intervención eficaz para el control de signos y síntomas, además de que puede tener ventajas de larga duración sin presentar ningún efecto secundario. 











Extraído de: 

Montgomery, G. H., & Schnur, J. B. (Diciembre de 2004). Eficacia y Aplicación de la Hipnosis Clínica. Papeles del Psicólogo, n° 89.
Copyright 2004 © Papeles del Psicólogo 
ISSN 0214 - 7823