Ni
todos los dolores de cabeza son migrañas, ni todas las migrañas cursan con
dolores de cabeza. La cefaleao dolor de cabeza es una de las formas
más comunes de dolor. Aunque su causa es desconocida, el dolor que la produce
se debe a una dilatación de las arterias situadas en el cráneo.
Una migraña es un dolor de
cabeza recidivante, pulsátil e intenso que habitualmente afecta a un lado de la
cabeza, aunque puede afectar a ambos. El dolor empieza repentinamente y puede
estar precedido o acompañado de síntomas visuales, neurológicos o
gastrointestinales.
Aunque
la migraña puede iniciarse a cualquier edad, generalmente empieza en personas
entre 10 y 30 años de edad. A veces desaparece después de los 50 y es más
frecuente en mujeres que en varones. Si se tiene en cuenta que más del 50 por
ciento de las personas con migraña tienen familiares que también la padecen, es
de suponer que la tendencia puede estar transmitida genéticamente. En general,
el dolor de la migraña es más grave que las cefaleas tensionales.
Sintomas
No
se dispone de ninguna prueba de laboratorio que sea útil para el diagnóstico de
la migraña, aunque, debido a su patrón específico del dolor, suele resultar
fácil identificarla. Alrededor del 20 por ciento de las personas manifiestan
síntomas de depresión, irritabilidad,
inquietud, náuseas o falta de apetito, que aparecen unos 10 a 30 minutos antes
de iniciarse el dolor de cabeza (período denominado aura o pródromo).
Un
porcentaje similar de personas pierde la visión en un área específica
(denominado punto ciego o escotoma), o perciben luces dispersas o
centelleantes; con menos frecuencia sufren una distorsión de las imágenes, como
por ejemplo, cuando los objetos parecen más pequeños o más grandes de lo que en
realidad son. Algunas personas experimentan sensaciones de hormigueo o, con
menor frecuencia, debilidad en un brazo o pierna. Es habitual que estos
síntomas desaparezcan poco antes de iniciarse la cefalea, pero a veces se mezclan
con el dolor.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario